La Librería Lello y una magia digna de Harry Potter en Oporto

Si se habla de Harry Potter, indefectiblemente uno no puede evitar pensar en el Reino Unido: el viaducto de Glenfinnan escocés, la galesa playa de Freshwater West y el sinfín de escenarios ingleses, entre los cuales, por supuesto, se encuentran los de la magnífica Londres. Sin embargo, hay una ciudad bastante alejada de las islas británicas que también posee el honor de ostentar la magia potterhead: Oporto. Y, más precisamente, en la urbe portuguesa hay un sitio en particular que se roba toda la atención de los fanáticos del mago más famoso de la literatura: la Librería Lello.

Ubicada en pleno centro de Oporto —a metros de la concurrida Rua da Galeria de Paris y frente a la Universidad de Oporto—, la Librería Lello (Livraria Lello, en portugués) se ha convertido en uno de los destinos turísticos más concurridos no sólo de la ciudad, sino también del país y del mundo. ¿Por qué? Porque la autora de la saga de Harry Potter, J.K. Rowling, vivió en Oporto, dando así lugar a un sinfín de rumores que afirman que la librería fue su gran fuente de inspiración a la hora de describir muchas de las escenas de su mundo literario. Y, más allá de que muchas de aquellas historias acerca de la relación entre Hogwarts y la Librería Lello jamás fueron ni confirmadas ni desmentidas por la escritora británica, lo cierto es que el edificio en el cual está emplazada la librería se presta a la imaginación, pues sus imponentes escaleras de madera pueden recordarle a más de uno esas fantásticas escenas de las películas en donde las escaleras de la escuela de magia cobran vida.

UN POCO DE HISTORIA: EL ORIGEN FRANCÉS, EL CAMBIO DE DUEÑOS Y EL BOOM TURÍSTICO

El primer dueño de lo que hoy conocemos como Livraria Lello no era portugués, sino francés: Ernesto Chardron. Se trataba de un librero y editor nacido en Ardennes que, por encargo de su tío, se había establecido en Oporto en 1858. Once años después, y luego de haberse hecho rápidamente un nombre dentro del mercado editorial de Portugal, Chardron fundó en 1869 la Livraria Internacional, una firma que llegaría a editar a autores de la talla de Eça de Queirós y Camilo Castelo Branco.

Tras la muerte de Chardron en 1885 y luego de nueve años en manos de la también francesa Lugan & Genelioux, en 1894 José Pinto de Sousa Lello compró la Livraria Internacional, que desde entonces sufrió varios cambios de nombre hasta llegar al que la distingue actualmente: Livraria Lello e Irmão. Sin embargo, el cambio de nombre no fue el único que los Lello tenían en mente para su nueva compañía, sino que su ambición iba de la mano de la importancia que la librería había adquirido en la sociedad portuguesa. Por eso, y también por la pasión que los hermanos sentían por el arte y la cultura, decidieron construir un nuevo e imponente edificio que finalmente sería inaugurado en 1906.

Situada en el número 144 de la Rua das Carmelitas, la nueva sede de la Librería Lello estaba destinada a convertirse en todo un ícono de Oporto. Proyectado por el ingeniero portugués Francisco Xavier Esteves, el edificio fue toda una sensación para la época y la verdad es que no era para menos: fachada colorida y neogótica, hipnotizantes vitrales y las mencionadas escaleras de madera, que cautivan la atención desde el mismísimo instante en el cual se pone un pie en la puerta de entrada.

Más allá de haber sido ligeramente refaccionada en ocasiones anteriores, en 2018 la Librería Lello debió llevar a cabo una profunda renovación edilicia debido a la masiva concurrencia de turistas que desde hacía años atestaban sus instalaciones debido a esa supuesta relación con Harry Potter. La presencia de tanta gente dañó seriamente a un edificio que no estaba preparado para tanto público y hasta lo forzó a cerrar sus puertas para poder realizar el debido mantenimiento, pero a la postre se convirtió en una oportunidad de negocio que los dueños no dejaron pasar, pues actualmente en la librería se pueden encontrar las más variadas ediciones de la saga británica, que está disponible no sólo en portugués, sino en varios otros idiomas. Una estrategia que funcionó tan bien que, para visitar la librería, actualmente es necesario comprar a través de su sitio web un voucher con horario que se torna indispensable para organizar tamaña afluencia de turistas.

OPORTO Y HARRY POTTER: MÁS ALLÁ DE LA LIBRERÍA LELLO

La Librería Lello —que ha sido calificada en varias oportunidades como «la más bonita del mundo» por prestigiosas publicaciones internacionales— es por excelencia el destino predilecto para todo aquel potterhead que se proponga visitar Oporto. Sin embargo, y también debido a esos rumores que nunca fueron corroborados, la ciudad está llena de referencias a la obra de J.K. Rowling.

Como se mencionó anteriormente, frente a la Librería Lello se encuentra la Universidad de Oporto. Y es allí, en una de las casas de estudio más importantes del país, donde se puede apreciar a simple vista una clara pista que conduce a Hogwarts: los uniformes que usan los estudiantes. Aunque parezca increíble, y no sólo en Oporto en particular sino también en Portugal en general, algunos alumnos asisten a clase con unas largas túnicas negras que lucen muy similares a las popularizadas por las películas del niño que sobrevivió.

Pero eso no es todo, porque justamente frente a la Universidad se encuentra la Fuente de los Leones, una construcción del siglo XIX que posee la escultura de cuatro leones alados que, se dice, llevaron a Rowling a describir a Gryffindor, una de las casas más importantes de Hogwarts. Y si se quiere hablar de casas importantes, por supuesto que no se puede dejar de mencionar a Slytherin, la archirival de Gryffindor. Porque, aunque no tenga estricta relación con Oporto en sí, otro de los mitos en relación a la autora inglesa afirma que, tras empaparse de la historia de Portugal durante su estadía en la ciudad, J.K. nombró como Salazar Slytherin al fundador de la casa verde y plata tomando como referencia la figura de António de Oliveira Salazar, un dictador que gobernó de facto al país durante más de tres décadas.

Oporto se destaca por sus reconocidos vinos, por el extenso río Duero que forma una pintoresca imagen con las casas empinadas y con el Puente Luis I, y por ser la capital productiva de Portugal. Sin embargo, y como si todo eso fuera poco, gracias a J.K. Rowling, Harry Potter y la Librería Lello, hoy Oporto se da el lujo de presumir aún más magia. Una de esas que te lleva a querer conocerla y, posteriormente, a querer volver.

Imagen destacada y galería de imágenes: Martín Bugliavaz